El martes en el partido contra Olimpo, le robaron el celular a una mujer que va siempre a la cancha. Ella y su hermana explicaron que persiguieron al ladrón a los gritos, muchos vieron todo lo que pasó, que el chorro se metió en una de las hinchadas, se sacó la campera y le dio el celular a un cómplice. y que la hinchada no hizo nada para que el chorro devuelva el celular.
Otros hinchas que vieron la escena acompañaron a la mujer para que le explique a la policía lo que pasó. Nadie hizo nada. Y muchos vieron que hasta hubo policías que se burlaron de la situación. La damnificada le explicó a Cipo Pasión que el celular sólo puede activarse con su huella digital, por lo tanto era muy simple comprobar que era suyo. No sólo el chorro y los cómplices estaban a la vista de todos, un policía le explicó a la daminificada que el ladrón se llama "E.M.", tiene 16 años y vive en el Mapu. Pero nadie hizo nada.
La dirigencia del Club Cipolletti lamentó la situación y prometió ponerle Derecho de Admisión al ladrón. Es lo que está a su alcance, lamentablemente no soluciona un problema de fondo.
La difusión de este robo en las redes generó que otros hinchas reconozcan que no van más a la cancha por los problemas de inseguridad en la Popular. Muchos denunciaron que "la Policía te cachea como si fueses delincuente, y a los delincuentes no les hace nada".
"Mas que nada la culpa la tiene la cana. Si los hubieran cacheado antes de que salgan, como nos cachean en la entrada, encontraban el celu... Ese celular sólo se activa con mi huella digital, era muy simple comprobar que era mio. Pero no quisieron hacer nada".
Daniela Martínez, fiel asistente a la popular de La Visera.
No es barato ir a la cancha en familia como para que encima te arruinen el fin de semana con al menos inoperancia de la Policía de Río Negro. Además este año los hinchas que con toda la pasión del mundo se acercaron los sábados para mejorar los baños de la popular, denunciaron que les robaron la pintura. Y vale recordar que hubo gente que pudo acceder al estadio de madrugada a hacer pintadas a una altura considerable y durante al menos un par de horas antes del último partido del torneo pasado.
Cada vez más hechos amenazan la seguridad del estadio de Cipolletti. Es tarea de todos, principalmente de la Policía, cuidarlo para que sea un lugar de hinchas, de familias albinegras, y no de delincuentes que terminen decidiendo a la gente a quedarse en su casa los domingos.
rastreros entre uds....
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